La Paz, 24 de noviembre 2022 (Unicom- MDPyEP).- El destino turístico Rurrenabaque – Madidi – Pampas cuenta con una exuberante naturaleza para que los visitantes nacionales y extranjeros disfruten del turismo de aventura en la Amazonía boliviana, que abarca los municipios de Rurrenabaque, Reyes y Santa Rosa del Yacuma del departamento de Beni y San Buena Ventura e Ixiamas de La Paz.

El Gobierno nacional, a través del Viceministerio de Turismo, dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, impulsa la reactivación económica y promoción de ese destino turístico que tiene diversos sitios para que el visitante “viva una experiencia sin igual en contacto con la naturaleza”, indicó la viceministra de Turismo, Eliana Ampuero.

“El presidente Luis Arce siempre comprometido con el turismo y es una promesa cumplida que nosotros lleguemos al destino para que se pueda promocionar (…). Queremos que los bolivianos y bolivianas visiten nuestro país, que no se vayan a otro lugar, porque Bolivia tiene inmensidad de maravillas. Arrancamos con toda la fuerza, trabajamos con el sector del turismo e iniciamos esta travesía”, dijo la autoridad.

El visitante al llegar a Rurrenabaque encuentra gente acogedora, centros de hospedaje cómodos y una deliciosa gastronomía del lugar, para luego emprender el recorrido en bote por río para llegar al Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Madidi y vivir la aventura de caminar por el Cañón del Bala y los senderos, donde se recomienda al turista llevar una muda de ropa extra y zapatos deportivos, tomando en cuenta que se pasa por riachuelos y la zona es húmeda y selvática.

El guardaparque del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap), Sixto Divapuri, explicó que la extensión de esa área asciende a más de 2 millones de hectáreas, tiene desde 180 metros en tierras bajas hasta sus montañas a más de 6.000 metros sobre el nivel del mar, registra al menos 265 especies de animales, 5.015 especies de flora y de las más de 1.000 especies de aves que tiene Bolivia, el 70% está en Madidi.

“Comprende todos los pisos ecológicos desde la parte andina hasta la Amazonía, ninguna área protegida tiene las mismas características. En Bolivia tenemos 22 áreas protegidas pero no son similares, que hace que se denomine una de las áreas más biodiversas del planeta”, subrayó.

Después el turista emprende el viaje de aproximadamente tres horas desde Rurrenabaque hasta Santa Rosa, para continuar con la travesía por el río Yacuma para apreciar las maravillas de la fauna y flora, que es característico de ese lugar del país, “donde está prohibido la caza y portar armas de fuego, que hace que los animales estén muy tranquilos en su hábitat”, dijo el director municipal de turismo de Santa Rosa y del Área Protegida Municipal Pampas del Yacuma, Alejandro Gil.

Durante la navegación en bote, el director de Turismo de Santa Rosa describió que el visitante observa de cerca a los lagartos, aves, caimanes, capibaras, monos, tortugas y delfines, entre otras especies. Además, al finalizar la tarde el turista aprecia la puesta del sol en medio de la naturaleza.

“Agradecer al Viceministerio de Turismo, porque nos sorprenden, estas sorpresas son muy lindas para nosotros, después de una pandemia estamos buscando la reactivación del turismo, esto es un espaldarazo fuerte que nos dan para que podamos salir a nivel nacional e internacional”, apuntó.

Posteriormente, se puede vivir del turismo rural, que es una opción para quienes visitan el lugar, para participar de la faena de ganado, de la ambrosía, que consiste en la degustación de un cóctel de leche recién ordeñada con café, de acuerdo al deleite, después para cabalgar a caballo y desarrollar actividades de pesca con devolución en el río Yacuma, de manera sostenible.

Además, el turista puede nadar en la laguna Bravo y compartir una divertida jornada con los bufeos, delfines rosados, que son amigables y juguetones con los visitantes, además dar un paseo por un mirador para observar la naturaleza a su alrededor.

“Invitar a toda Bolivia y fuera de nuestras fronteras también a que vengan, es una experiencia fenomenal hacer todas estas actividades, que vengan a vivir una aventura inolvidable”, dijo Luz Marina Quenta, propietaria de Luz de Mar de Rurrenabaque, un restaurante que apoya a productores locales.